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Inhibición latente
La inhibición latente es un término técnico del condicionamiento tradicional se refiere a que a la observación de que un estímulo familiar requiere más tiempo en adquirir un significado (como una señal o bien estímulo condicionado) que un estímulo nuevo. El término "inhibición latente" data de Lubow y Moore (mil novecientos cincuenta y nueve). El efecto IL es "latente" en que no se muestra en la fase de pre-exposición al estímulo, sino más bien en la fase de prueba siguiente. Acá la "inhibición" sencillamente se refiere a que el efecto se expresa en concepto de un aprendizaje parcialmente pobre. El efecto LI es exageradamente robusto, apareciendo en todas y cada una de las especies de mamíferos que se han estudiado y por medio de muchos paradigmas del aprendizaje diferentes, lo que sugiere ciertas ventajas, como resguardar al organismo,asociar estímulos intrascendentes con otros acontecimientos más esenciales. Ejemplos como los ruidos, imágenes, sonidos, aromas, sensaciones, todo cuanto vemos, oímos, olemos, sentimos; la lista de estímulos que llegan a nuestra percepción a cada instante, todos y cada uno de los días, es inacabable. El humano es "bombardeado" continuamente con información de todo género, y no se refiere necesariamente a la T.V., la radio, el teléfono celular, el iPod, y todos y cada uno de los instrumentos de la sociedad moderna sino más bien a todo cuanto continuamente perciben nuestros sentidos y nuestra psique a cada instante, en nuestra habitación, al pasear por la calle, etcétera Es tanta la cantidad de información, que es imposible enfocar la atención en todos y cada detalle. El cerebro, para eludir sobrecargarse, tiene un mecanismo llamado "inhibición latente" que se hace cargo de filtrar toda la información que considera inútil o bien superflua para la vida rutinaria. La psique de las personas normales, al procesar un dato banal, lo olvida. En los que tienen niveles de inhibición latente más altos (normales) este mecanismo marcha como un "colador" que no deja que la persona se vea confusa por demasiadas cosas al unísono. En cambio, la psique de las personas con bajos niveles de inhibición latente, automática si bien de manera consciente, le dan la vuelta, lo estudian y lo archivan, a la espera de localizarle una posible utilidad. Si bien las palabras que se usan para describir esto parezcan facilitarlo todo, no es de esta manera. La baja inhibición latente es algo complicado (en ocasiones imposible) de manejar y puede ser sumamente peligroso. Esto se debe a que el nivel de información percibido por los sentidos (a cada instante) y transportado al cerebro en una persona con baja inhibición latente es en tantas ocasiones superior a lo normal, que si el cerebro no cuenta con la fortaleza precisa para encarar todo ese volumen de información, se quiebra y falla. Por su parte, la persona con baja inhibición latente, debe localizar la manera de manejar esta condición, si no, va a vivir en constante frustración. Todavía cuando prosiga procesando todo ese nivel de información (que es demasiado para la psique de una persona normal) debe aprender a enfocarse en cosas más específicas; y de conseguirlo, va a poder llegar considerablemente más lejos que quienes lo rodean, va a poder estar siempre y en todo momento un paso adelante del resto en lo que haga. Esta condición, aunque fue admitida académicamente en forma general desde hace pocos años, ha existido desde siempre y en toda circunstancia, y en los tiempos actuales se pueden localizar referencias claras a esto en lo que es conocido como Sicología de la Gestalt, surgida en Alemania a inicios del siglo XX; o bien con más fuerza en las enseñanzas de Marshall McLuhan desde la década de mil novecientos sesenta. Ciertos humanos considerados como "genios" padecían de baja inhibición latente. Esto no desea decir que todos y cada uno de los "genios" o bien "diferentes" en todas y cada una de las disciplinas sean de esta manera. Cada caso es individual y diferente, y hay que saber distinguir entre una psique más abierta y desestructurada que lo común. Siendo "lo común" el comportamiento normal de la mayor parte de las personas, quienes se manejan a diario mediante formas muy estructuradas de comportamiento y pensamiento, y en "territorios" reducidos mas seguros, sin aventurarse alén de eso. Albert Einstein es el caso más conocido; y asimismo lo son aquellos artistas en cualquier disciplina que tienen una extraña especie de talento superior a lo normal y que pasa inadvertido para la mayor parte de las personas. El efecto IL ha recibido una serie de interpretaciones teóricas. Una teoría mantiene que los resultados insignificantes anteriores al estímulo resultan en una asociatividad reducida para ese estímulo. Esa pérdida de asociatividad ha sido atribuida a una pluralidad de mecanismos que dismuyen la atención, que pueden precisarse para aprender a proseguir con normalidad.
