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Autocompasión
En la puertas de la eternidad. El pintor holandés Vincent van Gogh, aquejado de un grave trastorno mental, pintó este cuadro en mil ochocientos noventa. Auto-indulgencia es el sentimiento de pena cara uno mismo que experimenta un individuo en situaciones percibidas como desfavorables cuando dicha situación no ha sido admitida y no se tiene la confianza o bien la habilidad para amoldarse a ella. Es un sentimiento asociado al autoconsuelo con un esencial papel en las relaciones humanas, puede englobar desde un comportamiento breve, eventual y transitorio hasta un trastorno de personalidad que se expresa sin una provocación externa o bien como consecuencia de percepciones distorsionadas de la realidad, que provoca sufrimiento a uno mismo y a los que le rodean; mas que está mantenido por la existencia de un beneficio secundario. El individuo autoindulgente cree ser víctima de una situación negativa y por consiguiente merecer condolencia. La autoindulgencia es, de forma general, considerada un sentimiento negativo que no sirve de ayuda para tratar con situaciones adversas; no obstante, en un contexto social puede dar sitio a despertar simpatía o bien consejo. Esa forma más próxima a la autoaceptacion resulta recomendable llamarla autocompasión y puede ser considerada normal y, en ciertas circunstancias, saludable en la medida de que sea una situación transitoria y lleve a la aceptación o bien a tener la determinación para mudar la situación. La autoindulgencia puede vincularse a una contestación sensible que brota en un instante de agobio. Al tratar con situaciones agobiantes, la tendencia más habitual es sentir pena por uno mismo; no obstante, se muestra de forma muy, muy diferente conforme las peculiaridades de cada individuo, de forma que puede relacionarse con ciertas peculiaridades individuales como inseguridad sensible, depresión, exceso de indulgencia con los fallos propios, privaciones y pérdidas. La autoindulgencia puede retroalimentarse a si misma, singularmente si concurre un estado de depresión o bien otras circunstacias agraventes; no obstante, la autocompasión es una forma de prestarse atención a uno mismo; es un medio de conciliarse con uno mismo. Los teóricos del aprendizaje social afirman que la autoindulgencia es una argucia para recabar atención, en el momento en que un pequeño recibe atención cuando está enfermo o bien herido, aprende a prestarse atención a sí mismo (o bien pedir atención por la parte de otros) a través de llamadas a la ayuda, fingidas o bien reales. Además de esto, otra forma de refuerzo de la conducta puede ser la simpatía ofrecida por otros. El psicoanálisis la conceptúa como una reacción hipercatárquica de la libido que produce placer y dolor y que está muy relacionada con la comodidad personal. Es una forma de encarar las emociones que tiene como objeto calmar los estímulos sensibles desfavorables, que no sirven para la resolución eficaz de los inconvenientes, conducta que podría estar reforzada de forma positiva tanto por comportamientos sensibles como la atención, piedad, tolerancia y apoyo de otros como por comportamientos funcionales para la resolución eficaz los inconvenientes que afectan a la persona. La autoindulgencia es la causa de todas y cada una de las protestas de la vida. (por Hazrat Inayat Khan, profesor sufí) Es más usual en pacientes con depresión, trastorno límite de la personalidad y trastorno histriónico de la personalidad. En casos patológicos, conforme con la terapia cognitivo-conductual, el tratamiento consiste en la extinción de los refuerzos positivos que sostienen la conducta como la atención, la compasión, la tolerancia y, ante todo, no solucionar los inconvenientes en vez de la persona. Puede ser un inconveniente particularmente grave en los casos de victimización y de co-dependencia. El paciente debe reconocer que su actitud tiene como motivación oculta lucir las propias culpas y miserias con objeto de conseguir la compasión del resto, y que una vez logra esa atención externa, aumenta el victimismo acrecentando, como factor multiplicador, los factores que le hunden en la espiral depresiva, el paciente tiene por que ser siendo consciente de este hecho y una parte del tratamiento va a consistir en tomar consciencia de ello.Interpretación psicoanalítica
Interpretación cognitivo-conductual
Interpretación espiritual
Trastornos sicológicos asociados